3. Después de su uso, no deje los dispositivos en modo de espera
Para ello, por ejemplo, se puede utilizar una regleta de enchufes equipada con un botón ON/OFF. Según algunas estimaciones, esto puede ahorrar de media unos 100 € al año. Un ejemplo puede darte una idea: un buen modelo de smart TV de una marca conocida, de tamaño mediano (43″) consume 65W cuando está encendido, mientras que en standby está conectado a internet y con el bluetooth opción, consume, además de contribuir innecesariamente a la contaminación electromagnética, 6,5 W, de los cuales 3 W para LAN, 3 W para Wi-Fi, 0,5 W para bluetooth. Entonces, suponiendo que la televisión está en promedio durante 4 horas al día y las 20 horas restantes está en modo de espera, el consumo será igual a 94,9 KWh / año debido al uso real de la TV y 47,45 KWh / año debido al uso. en el stand – por de la TV. Si se tiene en cuenta que no hay ningún motivo técnico para dejar la televisión en standby, a diferencia del móvil, es fácil darse cuenta de que 47,46KWh/año es un derroche de electricidad y dinero.
4. Hacer el mantenimiento de los sistemas
Un sistema o aparato eléctrico bien mantenido consume y contamina menos.
5. Evite utilizar el sistema de calefacción/refrigeración sin tener en cuenta las necesidades reales
En particular, es necesario adaptar el uso según: a) la temperatura exterior, b) el número de personas en la habitación, c) el nivel de humedad, d) la presencia real de personas en las habitaciones calentadas/enfriadas, e) la apertura de las puertas y ventanas La adopción de un temporizador-termostato y válvulas termostáticas (si aún no están instaladas) es una ayuda útil para el funcionamiento de los sistemas.
6. Promover un correcto aislamiento térmico entre la vivienda y el ambiente exterior
Proteja las ventanas por la noche o durante las horas de calor cerrando las persianas y persianas o usando cortinas.
7. Utiliza los electrodomésticos de forma eficiente
Utiliza lavavajillas y lavadoras a plena carga para evitar repetir lavados y preferiblemente en las horas en que la energía es más barata, evita tener las luces encendidas en habitaciones donde no haya nadie y ajusta la intensidad según las necesidades reales de iluminación. Por último, un último consejo: cuando te vayas de vacaciones, es recomendable apagar el sistema de calefacción/refrigeración y desconectar de la red eléctrica todos los aparatos conectados a él.