Según una encuesta, muchos consumidores están menos dispuestos a comprar productos sostenibles más caros debido a la alta inflación. En un año, la proporción de consumidores que aceptan costos más altos por productos sostenibles se ha reducido a más de la mitad, según Monitor Deloitte, la consultora de gestión de la firma auditora. En 2021, un promedio del 67 por ciento de los encuestados lo dijo, ahora solo el 30 por ciento.
En agosto de 2022, la empresa encuestó a unos 1500 consumidores de 18 años o más. “Estas cifras indican una reversión de la situación, al menos por el momento”, dijo Thorsten Zierlein, especialista minorista de Deloitte. Sin embargo, los consultores de gestión asumen que esto volverá a cambiar cuando la economía mejore: “Pero hay muchos indicios de que este desarrollo puede revertirse tan pronto como las condiciones económicas vuelvan a ser más positivas”.
La actitud básica ha cambiado poco: por ejemplo, el 50 por ciento dijo que la producción sostenible de alimentos es importante para ellos. Hace un año era del 53 por ciento. Pero al mismo tiempo, el 41 por ciento dijo que los productos sostenibles serían más baratos o tendrían que ganar más para comprarlos.
En la encuesta, “sostenible” se refería a toda una gama de propiedades del producto, incluidos envases respetuosos con el medio ambiente, producción regional o ingredientes naturales sin aditivos químicos. (dpa)