En Silenzio, el bullicio lúdico se encuentra con el lento paso del tiempo.


‘Silencio’ de Leine Roebana.Estatua Anna van Kooij

A veces apenas la ves dando un paso. Emma Bogerd cruza tranquilamente el escenario contra una pared trasera que cambia de color. Debido al diseño de iluminación nítido de Jeroen Smith, parece una aparición con ropa blanca y aireada. Parece un papel desagradecido, como un bailarín durante una hora para hacer que su virtuosismo físico esté al servicio del paso a paso de caminar en esa línea de fondo. Sin embargo, es una contribución de suma importancia para silencioel nuevo espectáculo de danza de LeineRoebana, para el que el dúo de coreógrafos colabora con la acordeonista en directo Renée Bekkers y el violonchelista Ketevan Roinishvili.

Todas las erupciones juguetonas de movimiento de los otros siete bailarines en el espacioso escenario, todos los gruñidos, rasguños, gruñidos y suspiros en cuerdas, perillas, válvulas y teclas, casi parece un alboroto por nada, en comparación con el paso del tiempo, el paso lento como metáfora para un atisbo de eternidad. Eso es lo que hace el contraste. silencio tan fascinante

No todas las apariciones y desapariciones de los bailarines revelan su lógica. A veces se siente aleatorio cuando, después de un cuadro enérgico lleno de brazos cruzados y piernas que retozan obstinadamente, se van por las bambalinas o se sientan en taburetes junto a los músicos. Intercambian el aliento turbio y ominoso de un acordeón clásico como los profundos fuera con las espadas cruzadas de violonchelo y acordeón en en Croce, ambos de la rusa Sofia Gubaidulina, de 91 años. Tres veces complacen al público con partes instrumentales de mille regretz del compositor renacentista francés Josquin des Prez: dos bailarines se callan en un abrazo cauteloso y conmovedor. Pero luego, el violonchelista explota con brillantes bandas ascendentes y descendentes de George Crumbs. Sonata para solocello (parte 3. Toccata). La música a menudo tarareada y puntiaguda golpea constantemente a los bailarines en los pies. Excepto con Bogerd. Se mantiene en calma.

En 'Silenzio' los bailarines de LeineRoebana están acompañados por Renée Bekkers (acordeón) y Ketevan Roinishvili (violonchelo).  Estatua Anna van Kooij

En ‘Silenzio’ los bailarines de LeineRoebana están acompañados por Renée Bekkers (acordeón) y Ketevan Roinishvili (violonchelo).Estatua Anna van Kooij

silencio

Música dance

★★★★ renta

Por Leine Roébana. Coreografía: Andrea Leine y Harijono Roebana.

5/11, Teatro Chassé, Breda. Gira hasta el 2/8.

Emma Bogerd cruza tranquilamente el escenario contra una pared trasera que cambia de color.  Estatua Anna van Kooij

Emma Bogerd cruza tranquilamente el escenario contra una pared trasera que cambia de color.Estatua Anna van Kooij



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