Por Oliver Ohman
Alrededor de 9.300 kilómetros o 5.800 millas y una diferencia horaria de nueve horas separan a Berlín de la Ciudad de los Ángeles. Tal es el significado de Los Ángeles, fundado en 1781 por los españoles. Pero ambas ciudades están en realidad muy estrechamente conectadas.
Las metrópolis son ciudades hermanas desde 1967. Simbólicamente, tenemos Los-Angeles-Platz cerca de Kudamm y, como contrapartida, muy por encima de Hollywood, un “Bosque de Berlín” en Griffith Park. Al igual que Berlín, LA también tiene un oso en su escudo de armas.
El cine y los muchos exiliados que fueron de Berlín a los Estados Unidos después de 1933 formaron siempre un estrecho vínculo. Muchas estrellas de Berlín hicieron carreras internacionales en la fábrica de sueños de California, comenzando con Ernst Lubitsch y Marlene Dietrich. Al mismo tiempo, a Hollywood hoy en día también le gusta rodar en Babelsberg y en “lugares originales” en Berlín.
Numerosas universidades e instituciones científicas de Berlín (3,6 millones de habitantes) y LA (3,9 millones de habitantes) están en estrecho contacto, y también existe una estrecha cooperación económica y cultural.
En los Jardines del Mundo en Marzahn descubrirá un Jardín de Los Ángeles, en estilo propio con palmeras y trineos Amish. En West Hollywood, en cambio, encontrarás numerosas piezas del Muro expuestas, y en la dirección 317 South Broadway podrás comer una verdadera currywurst berlinesa.
Eso sí, no precisamente barata, la ración con patatas fritas por 14 dólares (alrededor de 13,90 euros).