Los disturbios ocurridos anoche en Dublín, la capital irlandesa, fueron los peores en décadas. Así lo afirmó el director ejecutivo de la policía irlandesa, Drew Harris, durante una conferencia de prensa el viernes por la mañana. Sus agentes se están preparando para más violencia y el viernes se incrementó la presencia policial en Dublín. El primer ministro Leo Varadkar calificó a los alborotadores como «una vergüenza para el país» el viernes.
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