Los vendedores del mercado tienen que afrontar el frío glacial con ingenio. En el puesto de frutas y verduras de Nicolás, hoy las frutas exóticas estaban cubiertas con una manta, pero también había que mantener calientes las demás verduras.
“Aquí tenemos algunas lonas para colgar y también dos cañones de calor para afrontar el frío”, dice el vendedor del mercado Nicolas Gezelle.
Y los clientes también tuvieron que abrigarse. Un gorro y guantes son indispensables en un día como hoy.