Antes de que pueda comenzar el desfile de carnaval en Zwartemeer, las cincuenta carrozas deben pasar una inspección técnica.
¿Y a qué le prestan atención los inspectores? «Que el generador no sea demasiado grande, que el conductor tenga suficiente visibilidad, que haya extintores y una manta ignífuga. Y la seguridad de los coches», afirma el juez Gert-Jan Keurs, también Príncipe de Carnaval.
Se mide el número de decibeles que salen de los altavoces de los coches y se ajusta el sistema de sonido a un máximo de 90 decibeles. «Esto ni siquiera es para las personas que van en los coches. Es principalmente para evitar que el público que se encuentra a un lado se quede sordo», dice Keurs.
Los jueces no se fijan en la belleza de las carrozas. «Eso es lo que hace el jurado», dice Keurs.
Los fabricantes de vehículos suelen ser muy conscientes de los requisitos que deben cumplir los vehículos. Por lo tanto, todos los coches suelen pasar la inspección.
Al cabo de una hora finaliza la inspección técnica y puede comenzar el desfile por el pueblo.