Una treintena de inspectores de los servicios de inspección social federales y flamencos inspeccionaron doce sitios en Amberes y Flandes Oriental y Occidental. “Resultó que diecisiete subcontratistas, sesenta empleados, siete autónomos y un aprendiz estaban activos. Encontramos violaciones sociales en más de la mitad de los casos”, dijo Eddy Van Herreweghe, director de dumping social y redes de fraude en el National Inspección de la Seguridad Social. Once subcontratistas y dos autónomos tampoco respetaron la declaración diaria de empleo, que exige la ley.
Por ejemplo, cuatro moldavos empleados ilegalmente fueron encontrados en un astillero en Seefhoek en Amberes. En otros sitios similares en Flandes Oriental y Occidental, la inspección social encontró trabajo no declarado y varias violaciones de la legislación laboral o violaciones de las normas de desempleo.
Proximus reacciona con sorpresa a los hallazgos de la inspección social y dice que no los conoce. Rik Missault, director ejecutivo de la empresa conjunta de fibra de vidrio Fiberklaar, también está sorprendido. “Hacemos muchas inspecciones proactivas en los patios”, dice. “Alrededor de noventa por mes. Nunca se han detectado infracciones”.