El partido comenzó con un gol de ensueño para Holanda, pero el final fue amargo para la perspectiva “oranje”. Un comodín lleva a Inglaterra a la final en el tiempo de descuento.
La pareja final en el Campeonato Europeo de Fútbol en Alemania es perfecta. El miércoles, en la segunda semifinal, Inglaterra venció a Holanda en Dortmund. Al minuto 90 el marcador era 2-1 para los “Tres Leones” gracias a un gol comodín en el último minuto. Desafían a España en la lucha por la victoria del torneo el domingo a las 21:00 horas.
El partido empezó muy entretenido. Inglaterra mostró su mejor actuación en esta Eurocopa, pero aún así se quedó atrás desde el principio. El profesional del PSG Xavi Simons, que jugó cedido en el RB Leipzig hasta el verano, le quitó el balón a Declan Rice, disparó desde 16 metros y pegó en la esquina superior izquierda (7º), un verdadero gol de ensueño para empezar.
Sin embargo, la respuesta no se hizo esperar. Harry Kane remató en la portería holandesa, el rival Dumfries mantuvo el pie en ella. Tras estudiar las imágenes del vídeo, el árbitro alemán Felix Zwayer decidió sancionar un penalti. El delantero del Bayern anotó con confianza por la izquierda, aunque el portero holandés Verbruggen había sospechado el saque de esquina (18º).
El juego continuó a un ritmo rápido y los ingleses tuvieron una participación significativamente mayor en el juego en la primera mitad. Pero primero Dumfries golpeó el larguero de la portería inglesa tras un saque de esquina (30′). Luego, en el otro lado, Phil Foden pasó de la derecha al centro. Su disparo al ángulo lejano desde unos 16 metros se fue al palo exterior (32′).
Momentos después, mala suerte para el entrenador del Bond, Ronald Koeman: el delantero Memphis Depay tuvo que abandonar el campo lesionado y Joey Veerman entró en su lugar (35º).
Con el marcador 1-1 y un aumento de las ocasiones para Inglaterra, entramos al vestuario. Allí tuvo que quedarse el atacante del BVB Donyell Malen. En su lugar entró Wout Weghorst, que recientemente estuvo cedido en el TSG Hoffenheim.
Al inicio del segundo tiempo el partido se ralentizó un poco. Inglaterra siguió tomando el control del juego, los holandeses esperaban un contraataque.
Las posibilidades de ambos lados se redujeron. De ser así, las normas entrañaban peligro. Como en el minuto 65, cuando el capitán y jefe de la defensa holandesa, Virgil van Dijk, remató con un dropkick tras un tiro libre desde el centro del campo de Veerman. El portero inglés Jordan Pickford dirigió el balón hacia un córner.
Apenas hubo señales de que Inglaterra estuviera a la ofensiva. La siguiente gran oportunidad la tuvo nuevamente la “Oranje” a través de Simons, quien, sin embargo, no logró rematar completamente el balón con una volea desde 16 metros (77’).
En el minuto 79 hubo un breve momento de emoción: en uno de los pocos ataques, los “Tres Leones” jugaron por su banda derecha. Foden alimenta a Kyle Walker, quien a su vez cruza hacia Saka. El atacante del Arsenal se desliza. Pero Walker, que dio la asistencia, estaba previamente en fuera de juego y el gol no cuenta.
Cuando todo el mundo ya se había preparado para la prórroga, el bromista inglés Ollie Watkins metió a la selección inglesa en la final de Berlín (90º).
Para Inglaterra es la segunda final consecutiva de la Eurocopa. Lamentablemente, en 2021 perdió ante Italia en los penaltis en Wembley. Ahora el equipo del entrenador Gareth Southgate, que anteriormente fue duramente criticado, quiere hacerlo mejor.