EM: El árbitro Daniele Orsato criticado tras el partido contra Alemania

Incluso entonces, los árbitros de vez en cuando delataban, pero eso podría excusarse por el hecho de que tal vez no podían (o no querían) ver la escena con claridad. Sin embargo, si innumerables cámaras graban cada centésima de segundo en el campo y un árbitro veterano detrás de las cámaras aporta su granito de arena para ayudar al árbitro, entonces 83 millones de entrenadores nacionales pueden exigir que la mostaza sea amarilla y no roja.

Así que, y como este texto ya contiene 3.500 caracteres, pero los comentarios no deberían ser más largos, se acabaron las molestias. Sólo una nota final: si infringe la segunda regla más importante del fútbol, ​​al menos deberá seguir la más importante. Es muy sencillo: las opiniones de los autoproclamados seleccionadores nacionales no deben tomarse demasiado en serio.



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