Es la temporada de suéteres cómodos y vino rojo rubí para calentar el alma. Nadie entiende esto mejor que Beyoncé, quien recientemente publicó imágenes de ella misma disfrutando de una velada muy festiva con trajes brillantes de temporada y decadentes Burdeos. Probablemente no te inmutarías ante esto último, a menos que también lograras detectar la botella y la bodega de donde proviene su bebida: un Chateau Petrus Pomerol de 1973. Sí, se despertó oficialmente el interés de los aficionados al vino de todo el mundo, ya que la marca francesa es un gigante respetado en el sector. Por este motivo, una botella añeja como ésta tiene un precio elevado.
“Château Petrus es considerada una de las bodegas más excepcionales y solicitadas del mundo”, explica Pablo Braida, maestro sumiller y vicepresidente de relaciones con el cliente del minorista. Corredores de vinos inmobiliarios. “Se encuentra en la denominación Pomerol de Burdeos en Francia. Es una de las mejores expresiones de la variedad de uva Merlot, que produce vinos con un carácter, profundidad y elegancia distintos”.
La escasez del vino, combinada con su alta calidad constante, ha elevado a Château Petrus a la categoría de icono, explica Braida. “Los coleccionistas y entusiastas suelen considerar las cosechas de Château Petrus como las posesiones más preciadas de sus bodegas”, dice, señalando que una botella de 1973 tiene un precio de unos 2.000 dólares, pero algunas cosechas de la finca pueden alcanzar los 7.000 dólares la botella. Sí, oíste bien.
Esto podría explicar la necesidad de Beyoncé de capturar la botella y sorberla en su reciente publicación. Después de algunas imágenes que capturan su perfecta manicura rosa, pantalones cortos plateados brillantes de Prada, suéter de cuello alto color marfil y un adorno de piel sintética a juego, la cantante publicó la codiciada botella de vino, que tenía garabatos y notas escritas en la etiqueta en Sharpie. La siguiente imagen en el carrusel de publicaciones mostraba a Bey con los ojos cerrados y sosteniendo amorosamente un vaso de vino tinto cerca de su cara, aparentemente a medio olfatear y lista para darse un capricho. Al capturar momentos tan específicos, uno asumiría que había cierta comprensión en torno al factor It del vino. Un vino icónico para un artista icónico, nos parece apropiado.
Si quiere ver por sí mismo qué hace que este vino sea tan especial, compre algunas de las variedades disponibles en Château Petrus a continuación. Pero ojo, los precios no son para los débiles de corazón.