Esta semana el fenómeno volvió a aparecer y el número de perros arrastrados a la costa aumentó de tres a seis en tan sólo unos días. Por primera vez, los hallazgos no se limitaron a Ostende, sino que Nieuwpoort también tuvo que lidiar con un perro muerto. Una hipótesis es que los perros murieron en las inundaciones de Westhoek y el agua los arrojó al mar. A la policía esto le parece poco probable porque no ha habido informes de perros desaparecidos. Si tiene algún consejo, póngase en contacto con [email protected]