La maniobra para traer a Marc Overmars, que ha dejado el Ajax tras las acusaciones de conducta sexualmente transgresora, como director deportivo, ha estallado en la cara del club de fútbol de Amberes. “El club ha caído en la trampa de la omnipotencia”, dice el profesor de Liderazgo Jesse Segers (Sioo, centro interuniversitario de organización y gestión del cambio). Teme que el despido de Overmars sea la única salida para restaurar la confianza en la integridad del club.
ttn-es-3