El líder del PVV, Wilders, advierte a la líder del VVD, Yesilgöz, que su partido pagará el precio si se hace imposible un gabinete con el PVV. “Se olvida que si no se nos da la oportunidad de traducir la voz y el mandato democrático de millones de personas en responsabilidad administrativa, sólo seremos cada vez más grandes”.
En X, su plataforma favorita para comunicarse con sus seguidores, Wilders respondió extensamente por primera vez el viernes al primer movimiento de Yesilgöz el viernes. Luego anunció que el VVD no está disponible para un gabinete. A lo sumo está dispuesta a nombrar un gabinete de “centro-derecha” (del PVV y del NSC de Pieters Omtzigt, ed.) para apoyar en términos generales.
Como la mayoría de los demás partidos de la Cámara descartaron la cooperación con el PVV antes de las elecciones, Wilders no tiene muchas opciones como ganador de las elecciones. Ya durante la campaña, y también desde el miércoles por la noche, toda su energía se ha centrado en hacer que a Yesilgöz y Omtzigt les resulte lo más difícil posible no hacer negocios con él.
Continuará con esto, anunció el sábado, a pesar de la “bolsa de trucos políticos” que, en su opinión, están abriendo ahora otros partidos. ‘Sigo siendo positivo y razonable. Seguiré moderándome. Y estar ahí para todos. Porque la responsabilidad que siento es muy grande. El PVV quiere contribuir a solucionar los grandes problemas que afrontan los holandeses. Demasiados solicitantes de asilo, muy pocas viviendas, poder adquisitivo insuficiente y atención sanitaria deficiente. Hoy, mañana o pasado, el PVV ayudará a gobernar los Países Bajos y yo seré Primer Ministro de este hermoso país.’
El lunes, el ojeador del PVV, Gom van Strien, iniciará conversaciones con todos los líderes del partido sobre la situación política actual. Como líder de la facción más grande, Wilders es el primero en actuar. Van Strien deberá informar sus conclusiones a la Cámara de Representantes el 5 de diciembre.
Raoul du Pré