El monumento de la Segunda Guerra Mundial de Bissegem obtiene un lugar nuevo y mejor

En la noche del 20 al 21 de julio de 1944, unos 300 bombarderos Lancaster de los Aliados volaron a Kortrijk para destruir el patio de clasificación. El bombardeo tenía como objetivo evitar que el ejército alemán llevara hombres y mercancías al frente sin problemas. Debido a que algo salió mal, muchas bombas cayeron sobre la ciudad misma, lo que provocó cientos de muertos.

Monumento más visible

En el lugar donde se estrelló uno de los aviones, en Bissegem, se ha levantado un monumento durante años para conmemorar a los 22 tripulantes de los bombarderos que murieron en el ataque. Pero ese monumento estaba algo escondido, bajo el viaducto de la R8. Cuando se renovó el puente de Bissegem, la ciudad de Kortrijk, Flemish Waterway y el contratista Jan De Nul acordaron dar al monumento un lugar nuevo y más visible, junto al puente.