El Lovie en Poperinge está desempacando con una terraza de vela
Después de 2 años de construir la terraza náutica con control en nuestro propio estudio, por fin ha llegado el momento. El pantalán zarpa con público por primera vez. Se ha pensado en todo: una barandilla alta y resistente, una rampa y ganchos para anclar una silla de ruedas. Una vez que todos están instalados, la terraza náutica se aleja lentamente del embarcadero por sus propios medios.
Las ruedas son impulsadas por un motor de silla de ruedas eléctrica. Puede conducir con el joystick de la silla de ruedas. Si algo sale mal técnicamente, los empleados están capacitados para usar palos de empuje para llevar la terraza de navegación de regreso al banco.
Los técnicos de ‘De Lovie’ han tenido mucho trabajo para hacer realidad este proyecto con muchos retos: la hidráulica, la tracción, el control, la estabilidad y la seguridad.