El fundador Sam Bankman-Fried, que ya era sospechoso de un fraude de miles de millones de dólares, también trató de influir en los políticos con donaciones, dicen los fiscales. Esos políticos luego tuvieron que organizar una legislación favorable para FTX. Pero las donaciones no cumplieron con las reglas que se aplican.
FTX quebró el año pasado. Cuando muchos clientes del intercambio querían cambiar sus monedas criptográficas por dólares, resultó que el intercambio criptográfico no tenía suficiente dinero. FTX había transferido los fondos de los clientes al fondo de inversión vinculado a FTX, Alameda Research, que invirtió el dinero en una variedad de empresas.
El sospechoso de 30 años, Bankman-Fried, se convirtió en multimillonario gracias al auge de las criptomonedas durante 2020 y 2021. Los fondos de los clientes que desfalcó, Bankman-Fried los invirtió en bienes raíces de lujo y donaciones políticas, según las autoridades estadounidenses.
Se han formulado en su contra un total de doce cargos. El ex multimillonario está en libertad bajo fianza, por una fianza récord de $ 250 millones, y actualmente reside en la casa de sus padres en California. Dos de sus socios cercanos ya se han declarado culpables y están cooperando con los fiscales. Bankman-Fried mantiene su inocencia.
MIRAR. Sam Bankman-Fried: «No sabía que el dinero de los clientes se estaba usando incorrectamente»