En enero, Cristiano Ronaldo se convirtió en el primer jugador de primer nivel en fichar por Al-Nassr por un salario anual estimado en 200 millones de euros. Le siguieron Neymar, Karim Benzema, Sadio Mané y Georginio Wijnaldum, entre otros.
En la competición saudí se gana mucho dinero, lo que genera críticas. “También creo que los jugadores quieren venir a jugar al fútbol aquí porque les beneficia económicamente. Pero eso es lo que todos queremos”, piensa el dirigente de la competición, que espera que los jóvenes talentos también se sientan llamados a venir al país. “Espero que un jugador joven como Jamal Musiala, a quien admiro mucho, decida venir con nosotros algún día”.
Arabia Saudita es a menudo criticada por violaciones de derechos humanos. El país está acusado de sportwashing y organiza importantes eventos deportivos para mejorar su imagen.