En Sri Lanka, el candidato de izquierda Anura Kumara Dissanayake ha sido elegido nuevo presidente. Así lo informó la comisión electoral tras la segunda vuelta del escrutinio del domingo, según informaron agencias de noticias internacionales. Después de la primera ronda de escrutinio, ninguno de los candidatos había obtenido el 51 por ciento de los votos requerido. En la siguiente ronda también se contaron los “votos de segunda opción”, a los que los votantes de Sri Lanka deben renunciar.
Dissanayake finalmente derrotó al líder de la oposición Sajith Premada con más del 57 por ciento de los votos, quien obtuvo más del 43 por ciento. También obtuvo la victoria sobre el actual presidente liberal Ranil Wickremesinghe, quien asumió temporalmente el gobierno hace dos años después de que su predecesor tuviera que dimitir. Wickremesinghe fue designado por el gobierno para resolver profundos problemas económicos y sólo sería presidente por dos años. Tuvo que conformarse con alrededor del 17 por ciento de los votos.
Inestabilidad económica y política
Desde 2022, Sri Lanka ha estado experimentando una gran inestabilidad económica y política, que muchos habitantes de Sri Lanka atribuyen a la élite política que ha gobernado la isla durante los últimos veinte años. Durante su campaña, Dissanayake prometió poner fin a la corrupción y liderar el país de forma transparente. Dissanayake también ha dicho que sacará a la economía del estancamiento desarrollando aún más la industria y el sector de TI.
Con su promesa de renovación, Dissanayake logró deshacerse de la sombra que se cernía sobre su partido marxista Janatha Vimukthi Peramuna (JVP), que fue en parte responsable de la sangrienta violencia política en Sri Lanka en los años 1970 y 1980.
El partido forma parte de la alianza PNP, un grupo progresista de partidos surgido durante las protestas de 2022, en particular los jóvenes y los trabajadores votaron por la coalición, que puede gobernar por primera vez después de apenas haber desempeñado un papel en las elecciones anteriores.