El Internazionale hizo excelentes negocios en la Liga de Campeones el martes. El equipo italiano, con tres holandeses en sus filas, ganó con algunas dificultades en casa al Red Bull Salzburg: 2-1.
El Inter se adelantó a los diecinueve minutos en el Stadio Giuseppe Meazza, tras un ataque sobre varias fichas. El balón finalmente acabó en los pies de Alexis Sánchez. El experimentado chileno arremetió de un solo golpe y encontró el ángulo lejano.
El equipo de Simone Inzaghi olvidó presionar y permitió a los visitantes de Salzburgo volver al partido tras el descanso. La forma en que se hizo fue hermosa. Los austriacos dividieron la defensa del Inter con una suave combinación, tras lo cual Oscar Gloukh disparó contra las cuerdas el 1-1.
Por eso el Inter tuvo que buscar una marcha extra. Los italianos lo encontraron. Unos minutos después del empate, el balón pegó en el punto de penalti tras una falta de Lucas Gourna-Douath. Hakan Çalhanoglu convirtió el penalti: 2-1.
En el Inter, Stefan de Vrij y Denzel Dumfries tuvieron plaza de titular, este último fue sustituido en la segunda parte. A Davy Klaassen se le permitió entrar unos minutos antes del pitido final.
La victoria coloca al Inter en la cima del Grupo D con siete puntos en tres partidos, mientras que el Red Bull Salzburg es tercero. Más tarde, el Benfica se enfrentará a la Real Sociedad en casa en este grupo.