La doble venta a los brasileños permitiría a la empresa ahorrarse 20 millones en salarios y fichar por Dybala
El eje Milán-Río de Janeiro se confirma como el carril preferente del verano nerazzurro, aquel sobre el que dar los pasos decisivos hacia esa reducción de costes de gestión señalada como prioritaria por la alta dirección del Inter desde el verano pasado. La despedida de Arturo Vidal, que tendrá lugar en las próximas horas, supondrá un recorte de más de 10 millones brutos en el próximo presupuesto, el mismo objetivo que en Viale della Liberazione pretenden alcanzar incluso con Alexis Sánchez, quizás gracias a los “aliados” cariocas.