Más poder adquisitivo, más exportaciones, más inversiones: la economía alemana poco a poco va recuperando su rumbo. Pero todavía falta mucho en el cuento de hadas del verano.
El Instituto Ifo elevó su previsión de crecimiento económico en Alemania para este año del 0,2 al 0,4 por ciento.
El poder adquisitivo de los hogares aumenta y es probable que aumenten las exportaciones: “La economía alemana está saliendo lentamente de la crisis”, afirmó el jueves en Berlín el director económico de Ifo, Timo Wollmershäuser. Sin embargo, la política económica del gobierno federal está contribuyendo a la incertidumbre de consumidores e inversores.
Los salarios aumentaron y se espera que la inflación caiga aún más este año hasta el 2,2 por ciento. Esto significa que el consumo privado de los hogares, que a principios de año estaba disminuyendo, podría volver a aumentar gradualmente, afirmó Wollmershäuser. Se espera que el comercio mundial y la producción industrial mundial sigan recuperándose a partir del segundo semestre del año, aumentando así también las exportaciones alemanas. Sin embargo, el nivel anterior ya no se alcanzará porque la industria de alto consumo energético abandona Alemania.
La flexibilización de la política monetaria apoya las inversiones, afirmó el investigador económico. El Instituto Ifo espera dos recortes más de tipos de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE) este año. Esto podría “quizás iniciar un cambio en la industria de la construcción a finales de año”.
“El rumbo tiende a ser la recuperación”, afirmó Wollmershäuser. Pero el gobierno federal no tiene un rumbo claro de política económica. El presidente del Ifo, Clemens Fuest, dijo que había “un poco de mejora en la economía, pero los problemas estructurales no están resueltos”. Las inversiones en Alemania están disminuyendo porque faltan condiciones marco estables. Con nuevas cargas burocráticas y regulaciones innecesarias como la Ley de Eficiencia Energética, la política económica incluso está causando daños. Los debates sobre los controles de alquileres y los requisitos energéticos disuadieron a los inversores en la construcción residencial.
Según las previsiones del Ifo, es probable que este año el número de desempleados aumente de 2,6 millones a 2,7 millones. Esto corresponde a una tasa del 5,9 por ciento. Se espera que el año que viene el número de desempleados vuelva a descender hasta los 2,6 millones. Se espera que el número de personas empleadas aumente ligeramente de 45,9 millones a 46,1 millones este año y a 46,2 millones el próximo.
Fuest defendió el freno de la deuda. Deja a los políticos suficiente margen de maniobra. Pero lamentablemente utilizan el dinero de los impuestos principalmente para el gasto de los consumidores en lugar de invertir en el futuro. Según el Instituto Ifo, el déficit nacional se reducirá significativamente, de 99.000 millones a 73.000 millones de euros este año y a 54.000 millones de euros el año que viene.
El Instituto Ifo espera un crecimiento económico del 1,5 por ciento el próximo año. En las previsiones no se tienen en cuenta nuevos riesgos, como los aranceles en el comercio con China o EE.UU. Si Donald Trump vuelve a ser presidente de Estados Unidos y reduce los impuestos, eso también podría impulsar las exportaciones alemanas, afirma Fuest.(dpa)