Más tarde ese día, Cuby + Blizzards volará a Schiphol para una actuación en Zandvoort. “Tuvimos que actuar allí, pero según la buena tradición, Harry Muskee volvió a golpear el espigón. Si hubiera sido una canción olímpica, Muskee seguramente habría ganado el oro”, bromea el baterista Waterman. Muskee es conocido por sus peculiaridades. ‘Los matones de Grolloo’, como también dicen de él los miembros de la banda. Así que Muskee da por terminado el día.
“Pero estábamos en Zandvoort, con Mayall”, continúa Waterman. “Así que simplemente se sentó al piano y empezó a cantar”. Un periodista musical de la revista Kink también escribe sobre esa actuación. “Escribió que en algún momento sucedió algo que hizo que Muskee se detuviera y ‘que Hans Waterman cantara algunas canciones'”. Acuario todavía tiene que reírse de eso. “Un escritor así se perfilaba como un experto, pero no se daba cuenta de que cantaba la leyenda del blues Mayall.”
El texto continúa después de la foto: