BERLÍN (dpa-AFX) – En medio de la disputa de la coalición del semáforo sobre el rumbo correcto en la política económica y financiera, se ha conocido un nuevo documento político del ministro de Finanzas y líder del FDP, Christian Lindner. Como medida inmediata, esto exige la abolición definitiva del recargo de solidaridad, incluso para los que ganan más, y el cese inmediato de todas las nuevas regulaciones.
“Alemania necesita una realineación de su política económica”, afirmó. Esto debería ser de carácter fundamental. El documento se titula “El cambio económico en Alemania: concepto para un mayor crecimiento y equidad intergeneracional”. Está a disposición de la Agencia de Prensa Alemana. “Stern” fue el primero en informar sobre esto.
El documento sin fecha pide un “cambio económico” con una “revisión parcialmente fundamental de las decisiones políticas clave” para evitar daños a Alemania como lugar de negocios. La economía alemana se encuentra en una crisis de crecimiento. Una realineación de la política económica podría fortalecer la confianza de las empresas y los hogares privados.
En concreto, se habla de una moratoria inmediata para frenar toda nueva normativa. Continúa diciendo que, como medida inmediata, debería suprimirse el recargo de solidaridad, que todavía pagan principalmente las empresas, los autónomos, los autónomos y las personas altamente cualificadas. La solidaridad ya ha sido abolida para el 90 por ciento de los contribuyentes. El documento también afirma que los objetivos climáticos nacionales deben ser reemplazados por objetivos climáticos europeos.
Otoño de decisiones
El FDP lleva mucho tiempo pidiendo un “cambio económico” y ha declarado un “otoño de decisiones”. También son conocidas exigencias como la abolición total de la solidaridad.
Pero el momento del nuevo documento es explosivo: hace apenas una semana y media, el ministro de Economía, Robert Habeck (Verdes), propuso una vez más en un documento un fondo soberano de mil millones de dólares financiado con deuda para promover las inversiones de las empresas. El FDP lo rechaza, citando el freno a la deuda.
El Canciller Olaf Scholz (SPD) había invitado a una cumbre industrial, pero ni Habeck ni Lindner fueron invitados. El grupo parlamentario FDP había organizado una especie de contracumbre con las asociaciones.
En vista de las disputas en la coalición, en Berlín se especula sobre una ruptura de la alianza. El portavoz del gobierno, Steffen Hebestreit, lo rechazó./hoe/DP/ngu