Fue la preparación más emocionante jamás realizada para el Día del Camionero cada dos años en Staphorst. El viernes llovió mucho y la junta directiva de la asociación de pilotos De Lichtmis quiso cancelarlo todo. Gracias a los esfuerzos combinados de todo tipo de patrocinadores y voluntarios y al tiempo mucho mejor del sábado, todo pudo salir adelante.
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El Día del Camionero en Staphorst parece desmoronarse, pero milagrosamente se seca y miles de entusiastas vienen a disfrutar de los 500 reyes de la carretera.
