21 jul 2022 om 08:23
Sinan Can va a denunciar amenazas en su contra. El programador dice en El Telégrafo considerar detener su investigación de extremistas musulmanes debido a las amenazas.
Por: nuestros editores de entretenimientoCan ha estado investigando el mundo de los extremistas musulmanes durante cinco años. El documentalista estaba acostumbrado a alguna agresión en su trabajo, pero cree que las amenazas de muerte y la intimidación van demasiado lejos. Después de que Can fuera reconocido por varios salafistas en Londres, decidió presentar cargos.
Can, de 44 años, ha estado trabajando en el periodismo durante diecinueve años y la agresión de los espectadores no es ajena a él. Su serie sobre el Genocidio Armenio, por ejemplo, provocó reacciones airadas. Can fue llamado, entre otras cosas, “traidor”.
Desde 2017, su investigación se ha centrado en novias yihadistas, refugiados sirios y musulmanes fanáticos, como en su documental Tras la pista del EI (2017). Según Can, desde entonces las amenazas se han vuelto más explícitas. “Me preguntan dónde vivo y buscan información sobre mi familia. Me hacen saber cómo me van a castigar y qué les sucede a las personas que amo”.
No está claro quién está detrás de las amenazas. Se sabe que el ex residente de Eindhoven, Dadi M., guarda rencor contra Can. Dadi M. fue separado de su esposa Xaviera S. luego de una entrevista con Can y deportado. Se dice que le dijo a Can que “vendrá a los Países Bajos de todos modos, de una forma u otra”.
Can ganó dos veces el Tegel, el premio periodístico más importante de los Países Bajos, por sus documentales. Hubo mucho revuelo después de su serie. Los niños perdidos del califato (2018), El señuelo, Enemigo Público No. 1 (2020) y Califato de retorno (2021).