Los rumores se han hecho realidad. Gil Ofarim intentará su regreso el próximo año. El músico anunció su concierto en Instagram: “¡Matrix Bochum 2025! 🤍 ¡Estoy deseando que llegue mi primer concierto real en años!”, escribe. Subirá al escenario el 17 de abril de 2025. En el cartel del concierto aparece sentado sobre una piedra, estirando la cabeza hacia el sol.
Ofarim aún no ha proporcionado ninguna información sobre el lema “corregir el tiempo”. Pero sería difícil no sospechar que detrás de este título el cantautor podría retroceder en el tiempo y hacer las cosas de otra manera. Simplemente no habla de eso.
Todavía quedan entradas disponibles en Eventim para el concierto de Bochum y tampoco son muy caras: unos 55 euros. En Matrix sólo caben 700 personas, según anunció Ofarim el viernes (22 de noviembre). Hasta el domingo (24 de noviembre), el recinto de Bochum aún no había anunciado a Ofarim en su página de inicio ni en las redes sociales.
Gil Ofarim en Instagram:
El hombre de 42 años recibe una completa respuesta de sus seguidores en Instagram. Cabe destacar que su equipo de redes sociales no modera, oculta ni elimina los comentarios predominantemente negativos. Hay que darle crédito a Ofarim por eso: no hay censura.
Un extracto de las muchas publicaciones enojadas: “¿¡Me pregunto cómo quieres estar en el escenario sin agallas!?” Luego: “El tipo es simplemente increíble. ¿Quién tira el dinero tras ello? Está mintiendo. Mantente firme con tu historia. Acepta que otras personas tienen desventajas debido a esto. (…) ¿Así se comporta una buena persona? ¿Está rehabilitado? ¿Se arrepintió?
O: “¿A qué tipo de hotel irás esta vez?” y “¿Las ganancias irán al personal del hotel?” Entonces estaré feliz de venir”.
Algunos defienden a Ofarim: “Chicos, sean justos. Todo el mundo comete errores. Siempre es muy fácil juzgar a personas libres y emocionales por sus acciones. Detente frente a tu propia puerta y haz una pausa (…). ❤️“
¿Dos pájaros de un tiro?
Los fans pueden esperar un “viaje emocional a través del pasado, presente y futuro”, según el anuncio del concierto. Al parecer, este viaje comenzó apenas dos semanas antes. Porque el 12 de noviembre, el músico regañado regresó con un video de Instagram. Con mirada triste y voz pesada anunció: “Asumo la responsabilidad de lo que he hecho. Por cosas de las que me arrepiento, por las que siento pena y por las que estoy pagando”. Sin embargo, no se disculpó realmente en el clip en blanco y negro. Entonces, ¿fue todo esto sólo un truco de relaciones públicas para anunciar su regreso musical? Sin duda, habría sido bueno un poco de distancia entre dos historias de “grandes noticias”.
olvidar es dificil
Antecedentes: En noviembre de 2023, Gil Ofarim compareció ante el Tribunal Regional de Leipzig por difamación y acusaciones falsas. Dos años antes, este hombre de 42 años había grabado un vídeo delante del hotel Westin de Leipzig. En él, afirmaba que un empleado del hotel lo discriminó cuando se registró por su collar de la Estrella de David y le profirió insultos antisemitas con las palabras: “¡Empaca tu estrella!”.
El asunto llegó a los tribunales cuando el hotel lo demandó. El sexto día del juicio, Ofarim admitió que sus acusaciones resultaron insostenibles. Fue condenado a pagar una multa de 10.000 euros. El importe deberá abonarse a la comunidad religiosa israelita de Leipzig y a la asociación patrocinadora de la Casa de la Conferencia de Wannsee. Ofarim no realizó el pago hasta meses después.
En el clip publicado a principios de noviembre, Gil Ofarim hablaba de lo que había sufrido a raíz del “Asunto de la Cadena de la Estrella de David”. Ha perdido 25 kilos en los últimos meses y ha dejado el alcohol. Y busqué ayuda profesional. Pensó: “Todos merecen una segunda oportunidad. Quiero atreverme a hacerlo”. ¿Quién hubiera pensado que ahora se tomaría a sí mismo tan literalmente?
borrar un error
Muchos creen que Ofarim, que es judío, ha causado un gran daño a su comunidad religiosa. Y eso no es todo: en los comentarios debajo de su video fue criticado principalmente por su declaración egocéntrica, que carecía de una verdadera disculpa. Por ejemplo, no tuvo palabras para el empleado del hotel Westin, el “Sr. W.”, que pudo haber sido amenazado con despedirlo y que recibió amenazas de muerte. Tampoco se mencionó el hotel Westin de Leipzig, que estuvo expuesto a una tormenta de mierda.