El caso Schild & Vrienden está listo para ser presentado ante un tribunal penal casi 5 años después de los hechos

La oficina del fiscal de Flandes Oriental inició una investigación criminal luego de un informe de “Pano” el 5 de septiembre de 2018. Mostró que se compartieron mensajes racistas y antisemitas en grupos de chat secretos de Schild & Vrienden. En junio de 2019, Dries Van Langenhove fue acusado oficialmente. El fundador de Schild & Vrienden fue liberado bajo condiciones y tuvo que, entre otras cosas, seguir una visita guiada a Kazerne Dossin en Mechelen.

El Pleno de la Cámara levantó su inmunidad parlamentaria en marzo de 2021. Van Langenhove no fue procesado por la sala del consejo por negacionismo, pero fue remitido al tribunal penal por violaciones de la legislación sobre racismo y legislación sobre armas. La orden de exclusión por negacionismo fue apelada por dos partes civiles, y la Sala de Acusación (KI) dictaminó que, no obstante, debe responder por negacionismo. Desde entonces, Van Langenhove renunció a la Cámara.

La mayoría de los otros sospechosos solicitaron que no se prosiguiera la acusación, porque creían que no había delitos, pero además, también se solicitó a la sala del consejo la suspensión del juicio. La sala del consejo dictó la suspensión de cinco sospechosos, para que no tengan que comparecer ante el tribunal penal. En última instancia, Van Langenhove y otros seis sospechosos deben responder ante el tribunal penal. La Universidad de Gante, el Centro Interfederal de Igualdad de Oportunidades Unia, la Liga de Derechos Humanos y el Instituto para la igualdad de mujeres y hombres, entre otros, han iniciado acciones civiles.

La causa se iniciará el martes y se acordará un calendario de conclusión para que la causa pueda ser defendida tras la excedencia judicial, pero eso no es seguro en un expediente repleto de cuestiones procesales. Por ejemplo, la jueza de instrucción Annemie Serlippens se retiró después de una solicitud de impugnación de Van Langenhove y su abogado Hans Rieder, quienes argumentaron que Serlippens era parcial. A esto le siguió una nueva solicitud ante el Tribunal de Casación por sospecha legal, porque una de las partes civiles en el caso es un magistrado jubilado que estaba adscrito al tribunal de apelación de Gante. Finalmente, la defensa solicitó una verificación de la regularidad de la administración de justicia. La AI dictaminó que se había creado una apariencia de parcialidad por parte del juez de instrucción, pero eso no condujo a la anulación de documentos del expediente.