‘El Bende van Nijvel es el lugar más oscuro de la historia belga’


Imagen de 1985, serie de ficción belga ambientada en los turbulentos años 80, cuando Bende van Nijvel sembró el terror.Imagen VRT / Thomas Nolf

La década de 1980 en Bélgica fue una era de violencia criminal sin precedentes. Entre 1982 y 1985, nuestros vecinos del sur se vieron sobresaltados por una serie de robos sumamente sangrientos y casi idénticos, principalmente dirigidos a supermercados. Un total de 28 personas murieron y más de 40 resultaron heridas. Nunca se ha establecido con certeza quién estaba exactamente detrás. Sin embargo, siempre ha habido fuertes sospechas que apuntan en la dirección de un grupo de gendarmes corruptos de Bruselas del servicio de policía nacional.

Éste Pandilla de Nivelles, como se llamó al grupo, salió de Bélgica con un trauma nacional en curso. Desde entonces, ha aparecido una pequeña biblioteca de libros y documentales que son en parte procesamiento y en parte intentos de búsqueda de la verdad. La más reciente es la serie dramática. 1985, una referencia al año del último y más violento robo (8 muertes) por parte de la Banda de Nijvel. El primer episodio se transmitirá el domingo.

‘El Bende van Nijvel es el lugar más oscuro de la historia de Bélgica’, dice el director walter bouvin (35) en una conversación telefónica. “Pensé que era importante volver a contar esta historia, especialmente para los jóvenes que, como yo, no han vivido conscientemente la época. Tienes que imaginarlo: casi todo el país no se atrevía a ir de compras al supermercado a la hora de cierre, porque a menudo era la hora en que atacaba la Banda de Nijvel.

1985 es una mezcla de ficción y no ficción. Ficticio es la historia de la mayoría de edad de dos jóvenes gendarmes, interpretados por Tijmen Govaerts y Aimé Claeys.

A través de estos dos, el espectador desciende a las profundidades corruptas de la Gendarmería belga, en particular el departamento que se ocupa de los delitos de drogas. Allí, la llamada la hacen los veteranos Robert Beijer y Madani (conocido como Dani) Bouhouche, hombres sin moral ni sentido del deber, que pueden seguir su camino piadoso y criminal durante mucho tiempo. Cuando finalmente son expulsados ​​​​del Rijkswacht debido a delitos penales, aparecen como los principales sospechosos de los brutales robos.

Bouvijn: ‘La corrupción en la Gendarmería estaba muy extendida en ese momento. El mundo superior e inferior estaban completamente entrelazados. Sabía algo al respecto, pero cuando lo investigué aún más, casi me caigo de la silla por la sorpresa. Eso es diferente ahora, pero entonces la Gendarmería era suprema.

La figura más intrigante de 1985 es Madani Bouhouche, interpretada por el actor Roda Fawaz. Bouhouche era hijo de madre belga y padre argelino. A pesar de este trasfondo mixto, Bouhouche resultó ser partidario de la extrema derecha y mantuvo contactos amistosos en los círculos neonazis.

Bouhouche también insistió en que lo llamaran ‘Dani’ en lugar del árabe Madani. Según el director Bouvijn, el desprecio por sí mismo de Bouhouche y sus creencias de extrema derecha se originaron en una amarga relación con su padre argelino.

El oscuro conflicto interno de Bouhouche sale de la pantalla gracias a la actuación de Roda Fawaz. Tanto odio, hacia sí mismo y hacia los demás, hace muy plausible la excesiva violencia que siguió. En 2005 Bouhouche murió en libertad, sin admitir jamás su culpabilidad.

Bouvijn: ‘El hecho de que todavía estemos hablando de la Banda de Nijvel es porque nadie ha sido condenado por ello. 28 personas murieron, pero nunca obtuvimos una respuesta de por qué.

1985, desde el domingo 22 de enero en el canal belga One, 21 h.



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