«Para empezar, ayer estaba atrapado en un coche discreto de nuestro equipo. Después de que nos adelantó, pisó el acelerador y no señaló varias veces al cambiar de carril y al girar”, dijo la policía. El piloto novato también destacó por su exceso de velocidad en la IJsselallee. Allí se permiten 70 kilómetros por hora; el joven manejaba a 100 kilómetros por hora.
Las violaciones se acumulan, porque cuando apareció frente a él el letrero ‘siga a la policía’, decidió no hacerlo tampoco. El conductor cambió de carril y luego siguió a otro automóvil. «Al final, obtuvo el valor de su dinero cuando volvimos a montar para él».