El hombre que llevó a cabo un ataque fallido contra Donald Trump a principios de este mes había explorado con antelación con un dron la zona donde el candidato presidencial republicano celebraba su mitin. El director del FBI, Christopher Wray, dijo esto a los legisladores en el Congreso de Estados Unidos el miércoles.
Apenas unas horas antes de que Trump comenzara su discurso el sábado 13 de julio, Walter Crooks, de 20 años, voló un dron de vigilancia a unos 600 pies del escenario. El FBI encontró el dron y el control remoto en el auto de Crook.
El hecho de que haya podido sobrevolar la zona con el dron tan poco antes del inicio del evento en la localidad de Butler, Pensilvania, plantea nuevas dudas sobre la falta de seguridad por parte del Servicio Secreto.
‘La piedra angular está levantada’
Wray prometió el miércoles a los parlamentarios estadounidenses que su agencia «llegará al fondo del montón» en la investigación del acto «despreciable y atroz». Según él, Crooks estaba «muy concentrado» en el mitin electoral de Trump del 6 de julio.
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Según un ex agente del Servicio Secreto, el edificio donde se encontraba el atacante de Trump debería haber puesto todas las señales en rojo
Crooks también hizo una investigación en línea sobre cómo Lee Harvey Oswald disparó y mató al ex presidente John F. Kennedy en 1963. Por ejemplo, hizo la pregunta en Google: «¿A qué distancia estaba Oswald de Kennedy?»
Crooks recibió un disparo inmediatamente después de disparar las balas, que hirieron levemente a Trump en la oreja derecha. La directora del Servicio Secreto estadounidense, Kimberly Cheatle, dimitió el martes por el papel de su agencia en el fallido intento de asesinato.