Dirigiéndose a una multitud que vitoreaba su nombre, Orbán dijo: “Hemos ganado una gran victoria, una victoria tan grande que pueden verla desde la luna y ciertamente desde Bruselas”.
En las elecciones parlamentarias húngaras, toda la oposición se había unido contra el actual primer ministro Viktor Orbán. Seis partidos están representados en la coalición opositora Unidos por Hungría, desde la derecha radical hasta los partidos de izquierda ecologista.
Orban (58) ha sido primer ministro de Hungría por segunda vez desde 2010. También dirigió el país entre 1998 y 2002. Restringió la libertad de prensa y, según los críticos, manipuló la democracia a su antojo. Los acontecimientos en el país han sido una espina en el costado de Bruselas durante años.
Marki-Zay, de 49 años, había sido elegido por los partidos de oposición como retador de Orbán. Dice que quiere que el país sea más democrático y defiende un enfoque más proeuropeo. Según él, las elecciones fueron una elección entre Orbán y afiliación a Rusia, o la oposición y afiliación a Occidente. El domingo por la noche admitió haber perdido ante Orbán. Orbán es uno de los aliados más importantes de Putin en Europa, ha condenado la invasión de Ucrania, pero ha ido menos lejos que sus colegas europeos.
Los húngaros también podrían votar sobre nuevas políticas LGBTI, lo que haría casi imposible admitir abiertamente una sexualidad distinta a la heterosexual. Los resultados iniciales no proporcionaron ninguna indicación sobre estos temas.