Un look especial para el Burj Khalifa de Dubái, con sus 828 metros el rascacielos más alto del mundo: su fachada estaba iluminada en rojo y negro, con el logo del AC Milan y la inscripción “A light that never fades”, el nombre de la campaña multicanal y global que acompañará a la afición hasta el inicio de la ida de las semifinales de la Champions League ante el Inter.