Los detectives rastrearon el registro del vehículo desde el camión hasta una dirección en San Antonio. Los dos hombres fueron arrestados cuando salían de la casa, que estaba bajo vigilancia policial. Un tercer sospechoso, un ciudadano estadounidense que conducía el camión, también fue arrestado. También se espera que sea acusado, pero permanece en el hospital. No está claro qué le pasa al hombre.
Los migrantes muertos, 39 hombres y 12 mujeres, todos supuestamente de países centroamericanos, fueron descubiertos por el servicio de inmigración estadounidense en las afueras de la ciudad de San Antonio, en el sur de Texas, a unos 250 kilómetros de la frontera con México. La temperatura en ese momento era de 39,4 grados centígrados. Las autoridades dijeron que no había agua ni aire acondicionado en la bodega de carga donde estaban los migrantes.
Once personas sobrevivieron a la terrible experiencia. Fueron hospitalizados con síntomas de sobrecalentamiento y golpe de calor.