Dos compañeros de escuela británicos se reencuentran casualmente en las gradas del Liverpool después de 51 años

El partido de la Europa League entre el Liverpool y el LASK austriaco en Anfield el pasado jueves será recordado para siempre por James ‘Jimmy’ McCarthy y Colin McCabe, ambos de 67 años. Los dos estaban sentados uno al lado del otro en las gradas, a pesar de que no se habían oído ni visto durante 51 años.

Jimmy McCarthy y Colin McCabe se sentaron uno al lado del otro en la escuela secundaria de Liverpool durante cinco años, no por casualidad, pero sí de manera clásica debido a sus apellidos y el orden del alfabeto. Se convirtieron en mejores amigos. “Éramos como hermanos, visitándonos constantemente las casas de los demás.

Pero perdieron el contacto en 1972, cuando Colin, de 16 años, se mudó a Londres. Colin escribió una carta desde Londres a Jimmy en 1972, pero olvidó mencionar su nueva dirección. Además, Colin también cometió un error con el código postal y la ciudad del destinatario, por lo que su carta llegó a Jimmy solo tres meses después, a través de Loughborough, Leeds y Leicester. Luego, Jimmy intentó repetidamente averiguar dónde vivía Colin, pero sin éxito. «Estaba devastado.»

Y entonces, 51 años después, el destino le echó una mano. Colin ahora vive en Merseyside, en Liverpool. Normalmente se sienta en un lugar diferente en Anfield, el estadio del Liverpool, pero para el partido del jueves pudo encontrar un lugar mejor, cerca de la línea media del campo. Y… resultó que justo al lado de Jimmy.

«Que estaba destinado a ser»

«Llegué y vi a un chico de mi edad sentado allí», dice Jimmy. “No nos reconocimos porque la última vez que nos vimos fue hace 51 años, cuando teníamos dieciséis. Charlamos durante la primera parte y en el entretiempo pregunté: ‘¿Estás en las redes sociales?’”. Luego vieron los nombres de los demás en la ‘X’. «Él dijo: ‘¿Fuiste a la escuela primaria Cardinal Allen?’ y dije: ‘Sí’. Él nuevamente: ‘Soy yo, Colin’. Fue increíble. Lo miré y pensé: ‘Sí, lo reconozco’”.

No hace falta decir que hubo mucho por hacer para ponerse al día durante la segunda mitad. Se intercambiaron números de teléfono y los dos amigos del colegio se volverán a encontrar antes de Navidad. “Realmente estaba muy feliz. Tenía que ser así”, concluye Jimmy. Y el jueves por la noche su club de fútbol favorito también ganó 4-0 al LASK.

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