El nuevo director general de la DFB, Andreas Rettig, reaccionó con calma a las críticas, especialmente de Karl-Heinz Rummenigge.
“Me di cuenta de que yo no era necesariamente el candidato preferido del Bayern”, dijo Rettig durante su presentación ante la Federación Alemana de Fútbol. “Conozco la relación tensa. Necesitamos al FC Bayern, es el club más importante. No sirve de nada que nos separemos aquí”.
Antes de anunciar su nuevo cargo el viernes por la mañana, intentó ponerse en contacto con “el señor Hoeneß y el señor Rummenigge”. Sigue siendo un intento.
Rummenigge critica la decisión de la DFB
Rummenigge, miembro del consejo de supervisión del Bayern, y Oliver Mintzlaff, presidente del consejo de supervisión del RB Leipzig, anunciaron el domingo su dimisión del grupo de trabajo de la DFB. El grupo de trabajo no participó en decisiones importantes de la DFB y en algunos casos ni siquiera fue informado, criticó a Rummenigge y nombró explícitamente al personal de Rettig.
El presidente de la DFB, Bernd Neuendorf, subrayó el lunes que el grupo de trabajo nunca tuvo autoridad para tomar decisiones, sino que fue convocado como órgano consultivo. Después de su explicación habló por teléfono con Mintzlaff y Rummenigge. “La DFB no es un club”, afirmó Neuendorf. “En esta comisión nunca hubo deseo de hablar sobre gestión deportiva”.
Völler busca seleccionador nacional
Mientras tanto, Rudi Völler busca un nuevo seleccionador nacional. Neuendorf lo dejó claro. Rettig también ve a Völler “a la cabeza” en lo que respecta al plan de sucesión de Hansi Flick, como destacó.
“Se trata de evaluar la competencia profesional en función del contenido. En ese sentido él es superior a mí, fue campeón del mundo”, dijo Rettig sobre el director deportivo de la DFB, Völler, que depende de él a través del organigrama. “La gestión moderna no se define por estructuras jerárquicas. Es siempre una competencia por las mejores ideas para lograr la mejor solución”, dejó claro Rettig; no se trata de “quién tiene más asteriscos en la solapa”.