Habrá un nuevo juicio por la mala dirección de las investigaciones sobre la masacre de Via D’Amelio, en la que fueron asesinados el juez Paolo Borsellino y cinco agentes de escolta. Y, una vez más, habrá policías en el banquillo. Así lo decidió el Caltanissetta Gup David Salvucci, aceptando así la solicitud del fiscal Maurizio Bonaccorso.
La acusación de declaraciones falsas
Los policías Giuseppe Di Gangi, Vincenzo Maniscaldi, Angelo Tedesco y Maurizio Zerilli, que formaban parte del grupo de investigación Falcone e Borsellino que investigó las masacres mafiosas del 92, son acusados por la Fiscalía de Caltanissetta de haber hecho declaraciones falsas durante sus declaraciones en calidad de los testigos en el proceso sobre la mala dirección de las investigaciones sobre la masacre de Via D’Amelio que terminó, en segundo grado, con la prescripción del delito de calumnia para tres acusados.
Primera audiencia el 17 de diciembre
La primera audiencia se celebrará el 17 de diciembre ante el Tribunal de Caltanissetta. La acusación contra los cuatro policías es “por todos los cargos que se les atribuyen”, afirmó el juez de instrucción Salvucci, leyendo el auto.
Los abogados de los acusados: sin desvíos
En la última audiencia, los defensores de los cuatro policías habían reiterado repetidamente que los acusados ”nunca engañaron”, que “nunca mintieron en el juicio”, que “son servidores del Estado”, pero, sobre todo, que los policías del Grupo, los detectives Falcone y Borsellino fueron “el último clavo en la rueda de un carro que mueve a otro…”. Ante el juez de instrucción del Tribunal de Caltanissetta explicaron por qué los policías, entre ellos ya jubilados, “no deben ir a juicio”, como solicitó la Fiscalía. Para los 4 policías, se solicitó “no proceder porque el hecho no existe”, o “en su defecto, la recalificación de la conducta, como perjurio”.