Según cifras recientes de GGD Hollands Noorden y el RIVM muestran que el 14,7 por ciento de los jóvenes (de 16 a 25 años) en Alkmaar han consumido drogas en las últimas cuatro semanas. Eso es casi un cinco por ciento más que en 2021.
Presión social
¡También Mike van der Velde de Wij zijn BROER! está preocupado por nuestros jóvenes. “La presión que sufren en nuestra sociedad es un problema importante”, afirma Mike. “Y luego me refiero a la presión para tener éxito en la escuela, pero también a la presión de las redes sociales. Todo tiene que verse perfecto para los jóvenes”.
En su institución de atención intentan conectarse con los jóvenes. Después de una ‘ingesta en casa’, comienza un proceso de ocho semanas, lleno de sesiones grupales, actividades y conversaciones uno a uno. Los jóvenes ingresan a un grupo existente y son acompañados por compañeros que también tienen problemas y los comparten abiertamente. El objetivo del tratamiento es llegar al meollo de los problemas. “A menudo esto se debe a la soledad, el sentimiento de ser diferente o la injusticia”, dice Mike.
Para Denise, el enfoque fue dar en el blanco. “En lugar de hablar de mis problemas y de lo equivocado que estaba, me escucharon”.
El joven de 18 años ya ha vuelto a la escuela, trabaja en una guardería y disfruta del deporte. Mira hacia el futuro con confianza. “Me gustaría especialmente decirles a otros jóvenes que deberían hablar de sus problemas. Es muy difícil y te sientes vulnerable, pero eso te ayudará mucho”, concluye Denise.