El Ministerio Público quiere combatir los problemas de velocidad en el tráfico con los llamados radares flexibles: radares flexibles que se colocan en diferentes lugares. Pero, ¿tiene sentido esto si se siguen permitiendo detectores de velocidad como el Flitsmeister?
Los gobiernos de los países vecinos ya han intervenido. En Alemania, aplicaciones como Flitsmeister y Waze están prohibidas: no se pueden utilizar en el coche. En Francia, Flitsmeister sólo indica “zonas de peligro”, no radares concretos.
En Alemania te arriesgas a una multa de 75 euros si infringe las normas, en Francia la multa puede llegar hasta los 1500 euros.
¿Cree usted que el gobierno holandés debería tomar medidas contra el uso de detectores de velocidad? ¿O también tienen ventajas y es bueno que estén ahí? Háganos saber y participe del Comunicado del Día.