Al menos 36 autobuses urbanos, 4 camiones y un tren fueron incendiados el lunes en la ciudad brasileña de Río de Janeiro por milicianos organizados. Según se informa, las acciones son en represalia por la muerte del líder de una pandilla.
Los incendios se produjeron en nueve lugares diferentes del estado. Medios locales hablan de una de las acciones criminales más grandes de la historia de Río de Janeiro.
Cláudio Castro, gobernador del estado del mismo nombre, lo califica de acto de terrorismo y ha prometido responder al crimen organizado. Según Castro, hasta el momento se han realizado doce detenciones.
Se dice que el incendio fue una represalia por la muerte del líder de la milicia Matheus da Silva Rezende. Murió el lunes temprano durante un tiroteo con unidades especiales de la policía. Rezende era pariente de Luis Antonio da Silva Braga, quien encabeza la milicia más grande de Río de Janeiro.
Las milicias organizadas son un problema creciente en el estado, escribe el periódico brasileño oh Globo. Las organizaciones se comportan como la mafia y también se dice que tienen conexiones políticas. De hecho, estas milicias están tomando las decisiones en cada vez más zonas de la provincia.
Braziliaanse bende steekt tientallen bussen en trein in brand