De Lijn afirma que tendrá en cuenta todas las quejas para adaptar el plan de transporte. “En algunos casos se pueden actuar rápidamente, por ejemplo instalando un autobús de mayor capacidad”, afirma Marco Demerling, portavoz de De Lijn. “Intentamos cambiar lo más rápido posible. Todas las quejas se agrupan y analizan”.
Según el portavoz, De Lijn ha proporcionado suficiente personal en el centro de llamadas para poder atender las quejas más rápidamente. La naturaleza de las quejas es muy diversa, afirma Demerling, quien explica que a veces también implican preguntas.
El nuevo plan de transporte, que incluía la cancelación de 3.200 paradas, entró en vigor el sábado.