En Alemania, Google es acusado de violar una nueva ley antimonopolio. El regulador nacional cree que el gigante tecnológico no “ no deja suficientes opciones a los usuarios para administrar sus datos personales “. El gigante americano tendrá que dar más control a sus usuarios.
Alemania muestra sus colmillos
Según las conclusiones preliminares, Google viola una nueva ley alemana adoptada en 2021. Para cumplir, la empresa estadounidense deberá ser más transparente y dar más control a sus usuarios sobre la gestión de sus datos, en particular en su motor de búsqueda y en YouTube. La ley alemana está muy cerca de la Ley de Mercados Digitalesrecientemente votado por todos los Estados de la Unión Europea.
De hecho, la acción de Alemania es una señal de que las cosas cambiarán para grandes empresas tecnológicas dentro de la Unión Europea. Como explicó Andreas Schwab, relator del texto, en marzo de 2022, ” este acuerdo marca el comienzo de una nueva era en la regulación tecnológica global “. Las disposiciones de la Ley de Mercados Digitales (DMA) se aplicarán a partir de 2024. La ley europea incluye ciertas disposiciones similares a la ley alemana.
El objetivo es ayudar a las pequeñas empresas a competir con los gigantes digitales. Entre las medidas comunes a la DMA y la ley alemana, encontramos la obligación de las grandes empresas tecnológicas de compartimentar datos de diferentes departamentos, a menos que los usuarios permitan que se combinen. Alemania está mostrando sus colmillos, mientras que la Comisión Europea todavía está en conversaciones con los gigantes de la web sobre cómo pretende hacer cumplir la DMA.
Bajo esta nueva ley, Alemania también ha abierto investigaciones sobre Amazon y Meta. Por su parte, Amazon ya ha declarado que está cooperando con el regulador alemán. Sin embargo, según los especialistas, la coexistencia de las dos leyes plantea el espectro de una superposición y ” un posible conflicto de prioridades de aplicación entre Alemania y la Unión Europea “. Un auténtico quebradero de cabeza para las empresas tecnológicas.
Según el regulador alemán, la ley nacional va más allá que la DMA en el sentido de que “ requiere dar a los usuarios la capacidad de elegir cómo una empresa comparte sus datos internamente “. Esta declaración implica que los gigantes digitales pueden tener que anticipar diferentes opciones para usuarios alemanes y otros usuarios de la UE.