La larga ola de infraestructuras estratégicas y prioritarias continúa intacta y en 2023 marca un nuevo récord, elevando aún más el listón de costes hasta la notable cifra de 448 mil millones de euros, de los cuales 133 en el Pnrr-Pnc. Una montaña de obras entraron en programación y, hasta la fecha, financiadas en un 70%.
La fotografía proviene del informe anual de Cresme “Infraestructuras estratégicas y prioritarias 2023” elaborado junto con la oficina de investigaciones de la Cámara y la Anac y presentado ayer a la Comisión de Medio Ambiente de Montecitorio. Para poner las cifras en contexto, basta pensar que en apenas unos meses, desde la última encuesta del 31 de mayo de 2022, el sector ha recaudado otros 53.895 millones de euros, registrando un +13,7% frente al gasto identificado de 393.928 euros. «Si en los próximos diez años realizáramos todas estas intervenciones infraestructurales – explica el director de Cresme, Lorenzo Bellicini – cambiaríamos radicalmente la cara de nuestro país».
El informe radiografía el estado de avance de las obras y también arroja luz sobre los procedimientos de licitación, entre la planificación y la ejecución: aquí también gracias a la locomotora pnrr, hay una drástica reducción del tiempo que pasa de 12 a 1 mes. Por no hablar de la ralentización de las caídas y de la reducción de la participación de empresas en las licitaciones, que pasó de una media de 41 a 11, manteniendo la competencia en niveles aceptables. El futuro es cada vez más seguro: el paso progresivo de las obras desde la fase de licitación a la fase de construcción pesa sobre el sector. Sólo entonces veremos si el sistema aguantará. Pero vayamos en orden.
Costos y cobertura
El aumento de casi 54 mil millones de mayo a agosto tiene nombre y apellidos. En primer lugar, el aumento de costes de 39.295 millones debido fundamentalmente a la actualización de los marcos económicos por el aumento de los precios. Para los 14,6 mil millones de euros restantes, está la novedad del Puente sobre el Estrecho que entró en programación con 13,5 mil millones de infraestructuras y 1,1 mil millones de obras relacionadas. Del importe total de 447.823 millones, 36.627 se destinan a infraestructuras no prioritarias, mientras que la mayoría – 411.196 millones – se destinan a obras prioritarias. Finalmente, 132,7 mil millones de ellos se encuentran en el área Pnrr-Pnc: una cifra que habla por sí sola y reduce el papel de superestrella del Pnrr en comparación con la planificación de infraestructuras italiana.
La distribución
La mayor parte de esta avalancha de dinero se destina a los ferrocarriles, con 183,3 mil millones, seguidos de las carreteras y autopistas, con casi 124 mil millones. Cincuenta y siete mil millones se destinan a sistemas urbanos y 13,7 a puertos e interpuertos que pesan tanto, solos y sin obras complementarias, como el Puente del Estrecho (13,5 mil millones).