Por Claudia von Duehren
La exposición «OVNI 1665. La batalla de Stralsund» informa sobre los fenómenos celestes de la historia del arte y su distribución mediática.
Era el 8 de abril de 1665. Seis pescadores pescaban arenques frente a Stralsund. A las 2 p. m., los hombres observan cómo bandadas de pájaros en el cielo se convierten en barcos de guerra y se involucran en un estruendoso combate aéreo. Poco tiempo después, aparece un disco en el cielo sobre la iglesia de Sankt Nikolai: ¿un OVNI?
Con la exposición «OVNI 1665. La batalla de Stralsund», la biblioteca de arte muestra ahora el desarrollo de los fenómenos celestes en la historia del arte y su procesamiento en los medios. “Hoy, por supuesto, uno se pregunta qué fumaban o bebían los pescadores”, dice con una sonrisa el curador Moritz Wullen (56).
Las primeras ideas de dirigibles pueden haber inspirado los dibujos de los barcos del cielo en Stralsund. Foto: Biblioteca Estatal de Berlín
Dos días después, después de que los marineros huyeron y relataron sus experiencias, temblando de miedo y dolor, los folletos y periódicos estaban llenos de los hechos.
Fascinado por los acontecimientos de Stralsund, el director de la biblioteca de arte ha recopilado 50 ejemplos de representaciones históricas. Pero los grabados con extraños signos en el cielo, aeronaves, cohetes espaciales y discos voladores no dan testimonio de la creencia en extraterrestres.
Sólo 15 años después de los hechos aparece el grabado en cobre con las vivencias de los pescadores de arenques en el libro de Erasmus Francisci Foto: Biblioteca Estatal de Berlín
“Nadie creía en los extraterrestres en ese entonces. La gente vio el cielo como una superficie de comunicación con Dios. La aparición predijo una catástrofe inminente”, explica Moritz Wullen.
Muchos milagros celestiales son fáciles de explicar hoy en día: el polvo del desierto en la lluvia se convirtió en lluvia de sangre en las representaciones, que se remonta a los sufrimientos de Cristo. Los fenómenos ópticos en la refracción de la luz solar se encontraron en dibujos y grabados como signos de milagros celestiales. Los fenómenos meteorológicos se presentaban como avisos divinos.
El libro «Consideraciones serias e importantes de Robinson Crusoe» cubre el turismo espacial en el siglo XVII Foto: Museos Estatales de Berlín
Solo a fines del siglo XVII se cuestionó la escritura divina. “La idea de que incluso un ser divino solo puede trabajar dentro de los límites físicos ganó cada vez más espacio. Esto luego aumentó el espacio para representar extraterrestres”, informa el historiador del arte.
Hasta el 27 de agosto de 2023, la exposición estará acompañada de talleres y debates con, entre otros, el investigador de ovnis Hakan Kayal. Información: smb.museum.de