A fines de septiembre, se llevó a cabo en Los Ángeles la Semana de la Moda Metropolitana anual, que este año celebró su décimo aniversario. Como cada año, el foco de la gala estuvo puesto en la moda y el diseño de vestuario. Las creaciones de los participantes se exhibieron frente al impresionante edificio del Ayuntamiento de Los Ángeles, un telón de fondo especialmente adecuado para el tema del concurso de disfraces de este año, «Arquitectura mundial».
Entre los participantes del concurso se encontraba Kristin Brady, quien mostró un diseño relacionado con el edificio Tower C en la ciudad china de Shenzhen. Brady no solo se inspiró en la torre en sí, sino también en Zaha Hadid, la arquitecta, diseñadora y artista británico-iraquí responsable del diseño de las torres. Considerada una de las figuras más importantes de la arquitectura mundial de finales del siglo XX y principios del XXI, Hadid suele utilizar líneas y formas suaves en sus diseños, un enfoque visual que también le gusta a Brady.
Brady estudió las obras de Zaha Hadid antes de decidirse por el edificio de la Torre C como modelo para su vestido. Con el objetivo de desafiarse a sí misma, examinó no solo el complejo de gran altura en sí, sino también la ciudad en la que se construyó. En el proceso, encontró otra pista que influyó en su visión del diseño: las luces de la ciudad.
Piensa como un arquitecto
Brady dividió el proceso de diseño del vestido en cinco partes. Al igual que un arquitecto selecciona los materiales para un edificio, comenzó a buscar telas y finalmente encontró la solución perfecta para su visión de diseño.
A lo largo del proceso de diseño, Brady persiguió la idea de diseñar un edificio, no un vestido, lo que la sacó de su zona de confort como diseñadora. Tuvo que idear soluciones creativas y considerar estratégicamente cómo instalar las luces LED que representarían las ventanas de los rascacielos. Las luces se podían encender y apagar con un dispositivo escondido en los bolsillos del vestido. Combinado con los resplandecientes tonos púrpura, marrón y dorado de la tela, la construcción representaba la apariencia del edificio durante las horas nocturnas de la ciudad. Las amplias líneas del vestido reflejaban una vez más la inclinación de Hadid por las formas sinuosas, realzadas por la suave textura de la organza. La tela ha sido reforzada. «El desafío de pensar como un arquitecto al diseñar una pieza de moda me ha hecho crecer de muchas maneras», dijo Brady días después del desfile.
Para completar el diseño de una manera realista, Brady creó un paisaje urbano completo para la parte inferior del vestido, así como un diseño de sombrero con una terraza en la azotea y una piscina creados a partir de su propia imaginación. El vestido fue presentado por su amiga, una modelo conocida con el nombre de drag Shanita Blunt.
