Ha comenzado la cuenta atrás para el examen del documento de planificación presupuestaria previsto para el martes en el Consejo de Ministros, al que seguirá la maniobra el domingo o el lunes siguientes, y la tensión aumenta incluso entre los aliados en el gobierno. Lo que agita a la mayoría es la hipótesis de gravar los beneficios extraordinarios de los bancos, provocando chispas entre quienes se dicen a favor y quienes bloquean cualquier hipótesis al respecto. La Liga presiona para gravar a los bancos con Mateo Salvini que presiona para “gravar a los banqueros y no a los trabajadores”. Antonio Tajani de Forza Italia se ralentiza: “No podemos hacer la guerra a los bancos”, sino que “ellos deben contribuir poniéndose de acuerdo con el Gobierno”.
La Liga: “Es justo que los bancos contribuyan”
En la mayoría sigue habiendo tensiones en torno a los recursos necesarios para completar la cobertura de una maniobra que debería rondar los 24 mil millones. Así, mientras en las redes sociales de la FdI se reitera “una vez más” que “las subidas de impuestos no forman parte de la cultura política de este gobierno”, Lega y Forza Italia vuelven a chocar sobre la cuestión de los beneficios extraordinarios de los bancos. Para el subsecretario de la Liga Norte, Andrea Crippa“en los últimos dos años, debido al aumento injustificado y disparatado de los tipos de interés por parte del BCE, las siete principales entidades de crédito italianas casi han duplicado sus beneficios: +93%”. “Por lo tanto, es justo y equitativo – continúa Crippa – que ahora sean ellos quienes contribuyan a redistribuir la riqueza y a fomentar no sólo las clases menos ricas del país, sino también el crecimiento económico”.
Tajani (Fi): “No podemos hacer la guerra a los bancos”
El secretario de la FI, Antonio Tajani, detiene el razonamiento y se opone a la idea de gravar los beneficios extraordinarios “porque es algo de la Unión Soviética”. Para el Viceprimer Ministro “no podemos pensar en hacer la guerra a los bancos”, que sin embargo “deben contribuir, ponerse de acuerdo con el Gobierno y decir cómo pueden ayudar”. No tiene por qué ser necesariamente un impuesto, también puede ser una opción para fomentar, por ejemplo, la posibilidad de garantizar más liquidez”. Ciertamente, aclara Tajani al final de la Conferencia Nacional de Autoridades Locales de FI en Perugia, “no hay una sola persona que redacta el presupuesto y los demás lo aprueban. Debemos redactarlo todos juntos, lo aprobamos todos juntos en el Consejo de Ministros, y luego lo aprobamos todos juntos en el Parlamento”. “Con nosotros – reiteró Tajani – nunca habrá impuestos sobre los beneficios extraordinarios de los bancos”.
El tiempo se acaba: es hora de buscar cobertura
Mientras tanto, continúa la cuenta atrás para el examen del Plan Presupuestario. El gobierno presiona por el acuerdo y la amnistía para financiar la maniobra e intentar remodular los impuestos. No todas las coberturas seguirían vigentes, aunque la mayoría se mostrara optimista: “estamos en la recta final”. Una mano amiga, como cada año, debería venir del decreto de ley tributaria correspondiente, que en los últimos años también ha servido para adelantar algunos gastos para liberar recursos. La medida se está trabajando y, según algunos, ya podría estar lista para llegar al Consejo de Ministros el martes por la tarde, cuando estará sobre la mesa el documento de planificación presupuestaria que contiene la indicación general de las partidas de la maniobra. .