La fiscalía de Trento ha emitido una orden de detención contra el magnate austríaco René Benko, fundador del grupo Signa, que acabó en la prensa internacional hace poco menos de un año debido a un megahundimiento. También se habrían realizado otras detenciones en Italia, entre ellas el contable de Bolzano Heinz Peter Hager y la alcaldesa de Riva del Garda Cristina Santi. Todos están bajo arresto domiciliario. No se pueden descartar más novedades.
Las investigaciones coordinadas por la DDA de la Fiscalía de Trento con los Carabinieri del Ros y los Financieros de la Unidad de Policía Económico-Financiera del Departamento de Finanzas de Trento plantean la hipótesis de la existencia de un grupo empresarial capaz de influir y controlar las principales iniciativas del público. administración, especialmente en el sector de la especulación inmobiliaria en Trentino-Alto Adigio.
En las investigaciones participan 77 personas físicas, entre ellas 11 administradores públicos, 20 directivos y funcionarios de autoridades locales y empresas participadas, miembros de las fuerzas policiales, profesionales y empresarios. Además, numerosas personas jurídicas han sido denunciadas por responsabilidad administrativa.
El juez de instrucción compartió la objeción planteada por la Fiscalía al uso del método mafioso para el delito de asociación delictuosa. Los cargos impugnados incluyen: asociación para delinquir, manipulación de licitaciones, financiación ilícita de partidos políticos, tráfico de influencias ilícitas, estafa, percepción indebida de pagos en perjuicio del Estado, así como diversos delitos contra la administración pública, entre ellos corrupción, inducción indebida , revelación de secretos oficiales y omisión de documentos oficiales, así como violaciones de las normas tributarias vinculadas a la emisión de facturas por transacciones inexistentes.
Los militares llevaron a cabo más de 100 registros de otras personas investigadas, empresas y organismos públicos locales en las provincias de Trento, Bolzano, Brescia, Milán, Pavía, Roma y Verona, así como en el extranjero a través de canales de cooperación judicial internacional. Los empresarios implicados se habrían puesto a disposición para financiar las campañas electorales de los administradores públicos, obteniendo posteriormente beneficios, trámites simplificados y concesiones para iniciativas inmobiliarias.