Italia es un país con una economía orientada a la exportación. Sin embargo, muchos exportadores regulan sus relaciones con clientes, proveedores y colaboradores extranjeros con contratos poco estudiados, a veces incluso a la par de Internet. Subestimar los riesgos que corren. Especialmente en momentos como este, en los que los problemas vinculados a la guerra Rusia-Ucrania pesan sobre el comercio internacional (no es seguro que siempre se pueda invocar la fuerza mayor para eludir el cumplimiento de los compromisos contraídos en un contrato), la escasez de materias primas materiales y productos semielaborados, debido al aumento de los precios de la energía y la continuación de la pandemia.
El libro instantáneo “Contratos con países extranjeros”, en los quioscos con Il Sole 24 Ore el 12 de julio, explica cuáles son estos riesgos y cómo evitarlos. Primero se describen los contratos de forma general, como herramientas de trabajo y prevención de riesgos. Luego el análisis en profundidad sobre las consecuencias de la guerra, sobre el contrato más extendido (el de compraventa internacional), sobre los intermediarios, sobre las franquicias y sobre la nueva regulación europea en materia de acuerdos verticales.
El libro instantáneo se vende en combinación con el periódico “Il Sole 24 Ore” solo para suscriptores, en la venta separada del periódico el costo es de un euro.