Hay «señales crecientes de debilitamiento de la economía italiana, especialmente en la industria»: el centro de estudios Confindustria con el análisis mensual ‘congiuntura flash’ detecta un «crecimiento más frágil». “Siguen acumulándose signos de debilitamiento, especialmente para la industria y la construcción -explican a via dell’Astronomia- aunque el +0,6% del PIB italiano en el primer trimestre se traduce en un crecimiento ya adquirido del +0,9% en 2023”. Pesa mucho el «lento descenso de la inflación y el encarecimiento del crédito». Los servicios “son menos dinámicos. “En el consumo de los hogares hay menos bienes, especialmente alimentos, y más servicios”.
