En otoño, es difícil conseguir calabazas, y eso no es sorprendente. Puedes variar infinitamente con esta verdura. La sopa de calabaza es la favorita de muchos, sobre todo porque calienta maravillosamente cuando hace frío. También puedes preparar fácilmente grandes cantidades de esto, para tener algo sabroso y nutritivo en el almuerzo (o por la tarde frente al televisor) todos los días.
Es cierto que la sopa de calabaza “estándar” puede resultar un poco aburrida con el tiempo. Afortunadamente, hay mucho que se puede hacer al respecto. Con estos ingredientes podrás darle tu propio toque a tu sopa de calabaza.
jugo de manzana
El sabor dulce de la calabaza es, por supuesto, la razón por la que amamos tanto la calabaza, pero ¿sabías que los sabores dulces son aún mejores con una contraparte fresca? Por ejemplo, agregue un poco de jugo de manzana (puro) a su sopa de calabaza. Esto no sólo le da un sabor afrutado tocar a la sopa, también la hace aún más saludable. También puedes preparar jugo de manzana fácilmente hirviendo algunas manzanas durante unos 45 minutos, luego triturándolas y colando todo. Aún más fácil: pasa las manzanas por el exprimidor, si tienes uno.
Especias
Las hierbas mejoran todos los platos, incluida la sopa de calabaza. Por ejemplo, puedes añadir dos dientes de ajo (o más o menos, dependiendo de la cantidad de sopa que estés haciendo) mientras fríes la cebolla. Las hierbas picantes como el romero y el tomillo también combinan bien con el suave sabor de la calabaza. Una sopa de calabaza estándar puede tender a ser un poco blanda, pero puedes evitarlo con estas hierbas.
Miel o jarabe de arce
Anteriormente escribimos sobre cómo un poco de miel o jarabe de arce hace que el sabor de la sopa de calabaza sea aún más intenso. Esta es una gran opción, especialmente si eres muy goloso. Después de todo, la miel proporciona un toque extra dulce, que lleva el dulzor natural de la calabaza a un nivel superior. La miel también puede agregar profundidad a la sopa de calabaza, según el tipo que uses. Si quieres conseguir este efecto, elige miel con un pronunciado sabor floral.
Queso azul
No esperarías esta combinación y existe la posibilidad de que no a todos les guste. Aún así, vale la pena probarlo si te gusta la calabaza y el queso azul. Suave versus fuerte, dulce versus salado, terroso versus picante: los sabores contrastantes hacen de estos ingredientes un dúo particularmente sabroso. Puede elegir un queso azul granulado para darle más estructura a su sopa de calabaza o un queso azul que se derrita fácilmente para darle más cremosidad.
Verduras adicionales
Si le gusta la salud o quiere convertir su sopa de calabaza en una comida completa, simplemente agregue más verduras a su sopa. Las chirivías, las zanahorias y otras verduras de invierno combinan perfectamente con la calabaza gracias a sus sabores suaves y terrosos. De hecho, todas las verduras que pondrías en una sopa de verduras normal se pueden añadir a la sopa de calabaza. Por ejemplo, vuélvete loco con el tomate, el pimiento, el apio y los champiñones. Incluso puedes añadir trozos de carne (vegetariana) o albóndigas si te apetece.
Calabaza asada
Este no es un ingrediente extra, pero es un método que hace que tu sopa de calabaza sea considerablemente más sabrosa: asa la calabaza antes de usarla en tu sopa. Para ello, pique la calabaza (¡con piel!) en trozos, espolvoree con aceite de oliva (no demasiado, de lo contrario la calabaza se empapará), agregue un poco de sal si es necesario y coloque los dados de calabaza en un horno precalentado. Déjalos asarse allí durante aproximadamente una hora. Luego retira la pulpa de la cáscara de la calabaza y prepara la sopa como lo harías normalmente. Utilice algunas semillas de calabaza tostadas como aderezo para la sopa.
¿Te encanta cocinar, pero te interesa menos cortar todas las verduras? Estos sencillos consejos hacen que cortar puerro, coliflor y calabaza sea mucho más fácil:
Fuente: Lekkertafelen.nl, Verseoogst.nl, Koken.vtm.be